Habiendo comprobado la previsión meteorológica la noche anterior, el sábado 17 de febrero emprendimos la travesía hacia Cap des Clòsos. Saliendo desde el Pla de Beret, por GR 211, con la necesidad de portear los esquís hasta la cabaña de Parròs, donde la nieve reciente por fin nos permitió empezar a “foquear". Tras una subida suave junto al río, encontramos una pala con una pendiente pronunciada que nos haría alcanzar la cumbre del Cap des Clòsos 2416m. Bajando por una pala con nieve virgen muy pesada y húmeda y teniendo que poner de nuevo las pieles para ascender al Tuc de Costarjàs 2337m desde donde accedimos por pistas al parking del Pla de Beret.

En una ruta donde el riesgo de aludes aumentaba a medida que avanzaba la mañana, el
objetivo se centró en el correcto uso del DVA, la distinción de puntos calientes y observación del terreno, cambiante según los diferentes factores climatológicos. Gracias a la presencia de Vicent Vilar, quien hizo de profesor y líder, la práctica de todo lo anterior fue más fácil y efectiva.

El domingo 18 de febrero la actividad no empezaba hasta realizar protocolo de seguridad de DVA. El objetivo del día, el ascenso al mítico Pic de Baciver 2645m desde Orri. Dejábamos atrás el parking para adentrarnos en el bosque que crece junto al río, mientras ganábamos metros alternando subidas suaves con terrenos llanos. Llegados a los lagos helados de Baciver, afrontamos un ascenso por una pendiente empinada y muy rocosa, al final de la cual se avista la cima. Un último apretón por un tramo de cresta y alcanzamos el pico.

Finalmente, la esperada bajada, marcada por la pendiente y la calidad pesada de la nieve,
que iba siendo más húmeda y escasa a medida que nos acercábamos al parking.

Fin de semana para el recuerdo en un invierno atípico, esperando ilusionados el siguiente
encuentro con el resto del equipo.